El pensamiento
Hasta que el hombre no empieza a pensar es un infeliz. Cuando comienza a pensar se vuelve feliz y las cosas imposibles se hacen posibles. (1, 1810)
El pensamiento de un hombre determina su estado y lugar en la vida. Es el pensamiento que determina si un hombre va a ser pobre o rico, sano o enfermo, feliz o desgraciado. (1, 2017)
Los pensamientos y los sentimientos determinan cuál será tu lugar en el mundo, qué amigos tendrás, tu estado de salud : todo depende del pensamiento. (2, 2489)
Si queréis ser bellos, trabajad con vuestra mente. (1,1598)
Cada pensamiento se desarrolla correctamente en el silencio. Con vuestro pensamiento podéis curaros, ayudaros a vosotros mismos y también ayudar a miles de personas.(1, 1132)
La humildad es una gran fuerza. El pensamiento es una gran fuerza. La humildad y el pensamiento sanan. (2, 2445)
La fuerza de un hombre reside en su pensamiento. Cuanto más elevados sean los pensamientos que pasan por la cabeza de un hombre, tanto más sutil será para él este alimento. La palabra que proviene de Dios es el pan viviente, un alimento sublime para el hombre. La palabra es el pan viviente, la condensación de la energía Divina. Cuanto más lo mascáis más os aporta. (1, 1199)
Hay pensamientos ordinarios como piedrecillas de río, pero también hay pensamientos extraordinarios y luminosos. Estos se asemejan a las piedras preciosas. (1, 1545)
El pensamiento que tu envías en el mundo es un principio físico. Independientemente de si piensas correctamente o no, ya estas creando algo en el mundo. Esta fuerza, el pensamiento, que salió de tu mente, es la que crea. (1, 2037)
No creáis que alguien puede crear por sí mismo un pensamiento. Un pensamiento armónico se debe atraer de los seres que están muy por encima de vosotros. Lo mismo es valido para los sentimientos. El pensamiento Divino se trasmite a través de la luz, del aire, de la tierra, de las plantas, de las piedras. Quien comprende las leyes puede extraerla de todas partes. (1, 1090)
Al encontraros en una situación difícil debéis visualizar en vuestra mente la imagen de una persona inteligente, de un genio. ¿Cómo resolvería él este asunto? Debéis beneficiaros de esta relación. Visualizar en vuestra mente una persona inteligente y os aportará una ayuda microscópica. A veces estáis enfermos, dirigiros a Dios y visualizad en vuestras mentes a una persona sana. Pensando en Dios, en la gente inteligente y sana, la ayuda vendrá.(1, 1235)
Si quieres resolver una cuestión importante debes pensar cinco minutos y lo que decides debes hacerlo. Aunque pensaras todo un día llegarías a la misma conclusión. (1, 1375)
Bibliografía:
Beinsá Dunó, Sagradas palabras del Maestro, Tomo2, Sofía 1994
Beinsá Dunó, Sagradas palabras del Maestro, Tomo3, Sofía 1994